lunes, 9 de mayo de 2011

La personalidad americana

Cuando se cruzan con un visitante europeo, algunos americanos son muy americanos, en el buen sentido de la palabra. Con esto quiero decir que son amables a raudales, campechanos como un aldeano, entregados a la acogida de los viajantes. Los americanos saben que, salvo los indios nativos, todos fueron recién llegados en su día. Es la personalidad americana.

Si por alguna razón, usted llega a ser el invitado de un americano, amigo suyo, amigo de su amigo, conocido de su tío, tenga claro que no le faltará de nada. El americano le guiará por la cultura, explicándole lo que va sucediendo, le llevará a visitar lugares, y no suavizará su entusiasmo inicial. Su cantidad de energía es ilimitada.

Recuerdo cuando fui a ver un partido de fútbol americano de los Bruin en el estadio Rose Bowl allá por el mes de noviembre. Iba con una amiga francesa que había conseguido entradas a través de un chico de Taiwan que, a su vez, había sido invitado por un americano. Todos los invitados (cuatro asiáticos, la francesa y yo) fuimos acogidos por este americano. Durante el trayecto en autobús a Pasadena, nos preguntó nuestros conocimientos sobre aquel deporte raro, y respondimos con tímidas muecas de verguenza: apenas sabíamos algo más que el nombre. Nuestro anfitrión nos explicó las jugadas, las normas, las posiciones, las estrategias, y atendió nuestras tontas preguntas, sin vacilar con marcharse. Todo ello con una explicación imaginativa, llena de energía. ¡Imagínense! ¡Un europeo nos hubiese mandado al carajo a la media hora!

Al llegar a los alrededores del estadio fuimos a una barbacoa con el grupo de amigos de nuestro americano. Fuimos presentados como los invitados, y nos llovieron ofrecimientos de cervezas, a los que respondí agradecido, thank you, nice to meet you, ¿una cerveza más?, please, ¡claro, pongáme dos! Después me autoserví una hamburguesa, y seguí atendiendo las explicaciones.
Durante el juego, el americano nos explicó qué cánticos estábamos coreando y por qué, con infinita paciencia, de manera entuasiasta, sin mostrar cansancio alguna por nuestra cargante compañía. Al final, los visitantes correspondimos la amabilidad saltando de alegría con la victoria de los Bruin en el último segundo.

Aprecié lo mismo hace dos veranos cuando, por el centro financiero de la ciudad de Boston, buscaba con dos buenos amigos el parque Boston Common. Estábamos parados en una esquina de la ciudad, analizando el mapa, cuando un buen hombre nos preguntó nuestro propósito y nos dijo que le siguiéramos, que nos llevaría hasta las cercanías de aquel entretenido jardín.

Esta forma de ser también se manifiesta en algunos americanos en una energía arrolladora. Conozco a varios chicos de la universidad que saludan con una efusividad sorprendente, sacudiendo tu mano con tal fuerza, que pueden dejar a uno temblando. Son gentes que también gustan de hablar en público. Levantan la mano en clase sin prudencia y disfrutan de los minutos de oratoria. He cursado varias asignaturas sobre discursos, y los americanos son especialistas. Dominan el escenario, el protagonismo. Se les enseña desde las aulas.

También queda patente en los comercios de cualquier barrio. En todos los establecimientos hay un trabajador en la entrada que le saluda al llegar, le pregunta cómo está y le desea que tenga un buen día cuando usted se marcha. Los comerciantes son eternamente amables, muy pacientes y cuidan al cliente.

Aunque todo esto no son más que generalidades y también puede usted encontrar casos que demuestren lo contrario: como la regente de una compañía de alquiler de coches de mi barrio, que tiene muy malas pulgas, y medio responde antipática cualquier duda. La personalidad americana también tiene excepciones.

1 comentario:

  1. Totalmente de acuerdo en todo Luis!! Yo también me quedé encantado con esa forma de ser (generalmente, siempre hay excepciones), tratan de ayudarte en cualquier situación y se vuelcan con los extranjeros.

    Espero que todo siga bien, aunque viendo las fotos estoy seguro de que sí jeje. Un abrazo!!

    ResponderEliminar